Washington.- Al menos 523 militares estadounidenses cometieron suicidio durante el año 2023, un 9 % más que el año anterior, según un informe publicado por el Pentágono.

Los suicidios del personal en activo han aumentado gradualmente, siendo la cifra de 2023 un 12 % más alta que la del año anterior. No obstante, el estudio señala que las tasas de suicidio dentro de las fuerzas armadas fueron similares a las de las de la población estadounidense.

De los más de 500 miembros que murieron por suicidio, 363 eran miembros en activo, 69 eran reservistas y 91 de la guardia nacional.

El drama del suicidio entre los militares

La mayoría de los miembros del servicio en activo que murieron por suicidio eran hombres jóvenes alistados. Casi un 70 % eran blancos.

El arma de fuego fue el método elegido por un 65 % de ellos, seguido de la asfixia.

Un 4,7 % de las personas que se quitaron la vida en 2023 se identificaron como homosexuales o bisexuales.

Solo un 27,6 % había comunicado previamente sus intenciones de autolesionarse a su pareja (11,3 %), a un amigo (10,1 %) o al equipo médico (5,3 %).

Las cifras entre los familiares

En el año 2022, el último dato que ofrece el estudio, 146 familiares de los miembros de las fuerzas armadas murieron por suicidio: 93 esposas y 53 dependientes.

Este dato sí que se ha reducido en los últimos dos años, pues en 2020 el total fue de 200 miembros de sus familias y en 2021 de 165.

En septiembre de 2023, el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, anunció un plan de prevención del suicidio centrado en el fomento de un entorno de apoyo, la mejora de la atención de salud mental, la lucha contra la estigmatización, la revisión de la formación en prevención del suicidio y la promoción de una cultura de seguridad.